Semblanza

Cuando escucho la sirena de la ambulancia me emociono. Mi corazón comienza a latir tan fuerte, la sangre fluye muy rápido, mi pulso se acelera. Crea una pasión por  estabilizar, llegar, ayudar, entregar con vida al paciente. Desde el momento de cerrar la puerta, poner el equipo, llegar al lugar, entrar a su hogar, atender, bajar la camilla, abrir una solución, canalizar, limpiar las heridas, sentir que la vida depende de un segundo, y dejar el tiempo sobre tus manos, sin buscar un reconocimiento, un crédito o un gracias.  

Sentir que las calles de la ciudad aclaman ese grito de auxilio sin imaginarse el estrés, las  emociones, el riesgo y la pasión que provoca, haciendo  un momento donde se juegan los sentimientos, los problemas, los conocimientos  y habilidades de aquellos que pese a todo lo descrito queremos ayudar.



Yo soy enfermera, soy paramédico y soy humano,  con la pasión, el deseo de aportar, crear,  arriesgar y ayudar. 

Se crea un valor humanitario en el que disfrutas y obtienes un gozo por  dar vida sin importar las largas jornadas de sueño, hambre, solo deseas  prestar un servicio, sentir ese sufrir y transmitir amor.




   

Dentro de esta pasión de poder ayudar existe una rama en la enfermería  que es la neurológica, un tema que te da como propósito brindar  el cuidado integral del paciente,evaluar,  actuar  y valorar su decidid neurológico.